BAILARINA: CAPITULO 6

Pedro dejó a Robbie en la casa familiar y se marchó lleno de furia. Aquella mujerzuela mentirosa le había engañado y le había quitado cuatrocientos mil dólares. Además, el dinero era de Juan, con lo cual, él no podía bloquear la cuenta. 


Era demasiado tarde de todas formas. ¿Cuánto tiempo había pasado'? Seis días. No, seguro que lo había cobrado al día siguiente. Juan podría confirmárselo, pero no quería que el viejo supiera que le habían engañado como a un imbécil.


Dio un frenazo para parar en un semáforo y le dio un puñetazo al volante. Pensar que había sido engañado por una tierna, astuta, hábil y mentirosa con tales cualidades de actriz que sería capaz de ganar un Óscar, le ponía furioso. 


«Pero el asunto no ha terminado todavía, señorita Deedee Divine». Vamos a arreglarlo aunque tenga que estar sentado en Spike's toda la noche.


Aunque probablemente ya no estaría allí, sino en alguna playa de la Riviera Francesa o embarcada en un crucero por el Caribe.


«Estés donde estés, te encontraré», se juró. Spike's era el lugar donde tenía que comenzar la búsqueda