lunes, 2 de julio de 2018

LA TENTACION: CAPITULO 26




Pedro veía cómo pasaban los minutos en el reloj digital. Había oído a Paula con el ordenador y luego la había sentido meterse en la cama. Dios, estaba enfadado. Y también dolido. Pero no podía obligarla a que compartiera con él lo que por el momento deseaba ocultar. Lo único que podía hacer era protegerla.


Y sería mucho más fácil si supiera de qué la tenía que proteger. Pedro cerró los ojos e intentó dormir.


Definitivamente, el amor era una tortura.

1 comentario: